La Huelva Mística: Los Templarios en la Provincia de Huelva
La Orden del Temple llegó al suroeste peninsular entre los años 1253 y 1258, cuando el poder musulmán comenzaba a caer. Testimonio de ello es la cantidad de simbología que podemos encontrar del paso de los caballeros cristianos.
Vamos a realizar un recorrido por la Provincia para rescatar el lado más místico de nuestra tierra, lo cual creo que puede ser interesante, y es que Huelva es una de las zonas de la península donde la orden del Temple tuvo mayor fuerza, ya que varios municipios fueron cedidos a la orden por la Corona de Castilla. El motivo por el cual la orden del temple llegó a nuestra provincia fue en primer lugar por los lugares místicos de nuestra tierra además de esto lograron situarse en el sur de la provincia, en Lepe, en La Isla Saltes e incluso en La Rábida, ya que el temple quería una salida al Océano Atlántico en el Sur de la Península.LA NO PRESENCIA TEMPLARIA EN ARACENA
Vamos a comenzar intentando aclarar la presencia Templaria en algunos puntos de nuestra sierra, más concretamente en Aracena y Aroche. Según aseguró Javier Pérez Embid en su libro Aracena y su Sierra la presencia de la orden en la localidad arundense es una mera leyenda, según el autor, la relación del Temple con Aracena se ha atribuido a la toma cristiana de la Sierra de Huelva por los Templarios, cuando realmente dicha toma se realizó por la ocupación de Lusos y Castellano-Leoneses y no por la Orden. Además Emilio Carrillo en su obra La Orden del Temple- Un nuevo descubrimiento, nos demuestra con razones más que sobradas la no presencia templaria en este enclave de la serranía onubense.
En Aracena tenemos que ir a su castillo para situar el enclave principal donde a modo de leyenda situaban por tradición el legado de estos misteriosos monjes, más concretamente en La Iglesia Prioral de Nuestra Señora del Mayor Dolor o del Castillo, se encuentra construida probablemente sobre una mezquita musulmana junto a los restos del Castillo que construyeran los portugueses en el siglo XII en épocas de guerras fronterizas con los reinos castellanos. Como comentábamos anteriormente algunas fuentes dicen que la misma se construyó gracias a la Orden de San Juan o de Santiago y no a la Orden del Temple como por tradición suele argumentarse. Lo más interesante es su soberbia torre mudéjar con un claro aspecto militar y de defensa. En la parte superior del frente principal, único decorado, aparece en relieve una cruz, que puede ser la cruz de alguna de estas órdenes.
Como dato significativo, debajo del Castillo se encuentra la gruta de las maravillas, de la cual se dice que existía un acceso que comunicaba las mismas con el castillo, algo que históricamente intenta fundamentar la presencia templaria, ya que las formas de la gruta le dan un toque esotérico de templo, además unido a la persecución a la que fueron sometidos podían encontrar en ellas un buen lugar donde ocultarse, siendo este uno de los argumentos presentados sobre la presencia templaria en Aracena por quienes hasta ahora afirmaban tal hecho.
Muy cerca de Aracena, en Alájar encontramos la Peña de Arias Montano, llamada así ya que fue el lugar de retiro del famoso humanista. Según dicen esa peña es lugar de grandes fuerzas telúricas y ha atraído a lo largo de la historia a hombres de conocimiento. A los templarios se les atribuye la ermita original que se encuentra sobre ella actualmente, algo que no está demostrado.
LA ORDEN DEL TEMPLE EN LA SIERRA
Donde parece estar más clara la presencia Templaria es en Cortegana y en Cumbres Mayores, a pesar de existir poca documentación que lo acredite, principalmente por la razón que pocas décadas más tarde de su llegada la orden quedó disuelta.
En Cortegana tenemos como fiel testigo a su castillo construido por la orden bajo la autorización de Alfonso X, ya que la orden se hacía cargo de la construcción y además lo dotaba de milicia de forma gratuita, suponiendo esto una gran ventaja para el monarca ya que contribuía así a dar estabilidad a una zona donde no existía fortificación alguna y el bandolerismo era la nota predominante.
Los templarios vieron en este enclave al sur de la Sierra onubense el punto idóneo de conexión con la costa, ya que como comentábamos anteriormente este era uno de los objetivos fundamentales, consiguiendo con esta ubicación situarse más cerca de la misma puesto que hasta entonces el lugar más cercano era Jerez de los caballeros, en la actual provincia de Badajoz.
En Cumbres Mayores tenemos el Castillo de Sancho el Bravo edificado en 1293 sobre una edificación romana.
Por otro lado tenemos el Castillo de Fregenal de la Sierra encomendado a la Orden del Temple en el siglo XII. Destacan las ventanas y los vanos que se van abriendo a lo largo del muro. Cabe señalar también los detalles de su último piso y el escudo de la Orden del Temple. La Orden del Tmple ocupó el castillo hasta 1308. En julio del mismo año el rey exigió al Maestre de la orden la entrega de varias poblaciones entre las que se encontraba Fregenal.
EL CONDADO Y EL TEMPLE
Otro lugar destacado es la Hacienda de Refañana que se configuró como punto de abastecimiento de la Población de Villalba del Alcor, (debe su topónimo a que fue tomada por caballeros templarios procedentes de la encomienda del mismo nombre sita entre Valladolid y Palencia) y con esta base el dominio templario se expandió por todas las áreas limítrofes como Castilleja, Paterna (Castillo de Alpizar) y Escacena. Un lugar clave es la Iglesia-Castillo de San Bartolomé en Villalba del Alcor, construida sobre una Rábida o Ribat, como ocurre y veremos después en el monasterio de La Rábida y la Iglesia de San Antón de Trigueros. Y es que los templarios tenias predilección por arribar en estos lugares musulmanes, ya que solían ser lugares muy esotéricos. También en Villalba la ermita de Santa Águeda suele relacionarse con la Orden del Temple.
En Trigueros tenemos la Iglesia Parroquial de San Antón, desde siempre vinculada a los templarios aunque Amador de los Ríos en su Obra “Huelva” lo puso en duda afirmando lo siguiente. ”es el templo que en forma de casa fuerte edificaron los Templarios, a cuya Orden Militar dicen que por tradición consta haber pertenecido esta villa. Nada hay que justifique al presente esta aseveración, pues aunque la iglesia parroquial es reputada obra del siglo XIII, habiéndose hundido en el terremoto de 1.755 ha sido completamente reformada, y no se conserva rasgos ostensibles que permitan el supuesto”. Dicho Templo fue construido tras la reconquista sobre un ribat islámico almohade del siglo XII.
LA SALIDA AL ATLANTICO
La conexión con la costa se encontraba en Lepe y en otros dos puntos clave, hablamos de Isla Saltes y La Rábida. No fue por casualidad por la que los Templarios llegaron a estos lugares, ya que no son precisamente dos lugares cualesquiera elegidos al azar, sino que son dos puntos llenos de historia y significado. La Orden del Temple no solo contaba con una dimensión política y operativa , sino también con otra trascendente y mística que encajaba como anillo al dedo en La Rábida y en Saltés.
No vamos a contar ahora la historia de Isla Saltes y lo que significa para la historia de Huelva, será algo que haremos próximamente ya que creo que lo merece el lugar que probablemente guarde debajo de el la tierra de la antigua Tartessos.
La ciudad que en la Isla se encontró el Temple fue erigida por los árabes hacia los siglos X y XI, sobretodo cuando fue sede del Reino Taifa de los Baikries, primero, y del Reino de Taifas de Umba y Xaltis (Huelva y Saltés), después, bajo el reinado de Abd al- Aziz al- Bakri. El lugar donde los templarios se alojaron fue en una fortaleza central de 70×40 metros de perímetro, de la que poco sabemos.En cuanto a La Rábida fue en el actual Monasterio Franciscano, que como conocemos procede de muchas reconstrucciones, la ultima realizada a finales del siglo XIV y comienzos del XV, dicho monasterio está ubicado sobre un alcor el cual se le conocía como Peña de Saturno. Las diferentes culturas que por allí pasaron se inclinaron siempre por levantar en el recintos religiosos, incluso se dice que los romanos veneraron en este lugar a la diosa Proserpina y anteriormente los fenicios a su dios Baal. Los Visigodos recogieron la antorcha instalando sobre él un santuario a la Virgen Madre, adorada en una cripta, como tantas imágenes de Nuestra Señora que luego tomaron la advocación de “Soterraña” por haber recibido culto en una cripta subterránea, así mismo los árabes edificaron un pequeño monasterio con monjes-caballeros similares a los de las encomiendas templarias, que se perfeccionaban espiritualmente al tiempo que defendían el lugar.
Los Templarios tras la conquista de Fernando III llegaron a la Rábida en 1238 y remodelaron la edificación musulmana. Como hemos visto en muchas de las edificaciones vinculadas con la Orden del Temple en la provincia, estas se crean sobre diferentes “ribats”. La Orden ponía especial empeño en ocuparlos, prefiriéndolos, a cualquier otra posesión.
A la salida de La Rábida se produce la entrada en el de los Franciscanos. Lo triste, es que nada queda hoy a la vista que sea de época templaria. Tras el abandono por los caballeros vino la ruina y la reconstrucción Franciscana. Como curiosidad, lo único que podemos comentar es que si existe un manuscrito de 1515 que atribuye la donación de la Rábida al Temple por parte de Alfonso VIII de Castilla entre 1162 y 1200 para cuando fuese conquistada.
El objetivo final de la Orden del Temple en el suroeste de la Península como comentábamos arriba era la salida al Mar. Como hemos visto, La Rábida y Saltés constituían la base fundamental de esto, aunque el punto culmen tiene lugar en Lepe. La ciudad tras la reconquista fue donada a los Templarios en el siglo XIV antes de pasar a dominios del Marquesado de Ayamonte ya en el siglo XV. A ellos se les atribuye la original Iglesia de San Cristóbal.
Sin duda, nuestra provincia ha sido testigo de muchas visitas, unas probablemente llegarían fruto de la casualidad, otras, como esta, no.
Fuente: Wikipedia, Huelvapedia, “La Huella de los Templarios” de Rafael Alarcón Herrera, elblogdelaordendeltemple, ordendeltemple.net, “Huelva” Amador de los Ríos.
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